La Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa adoptó la Resolución 1416 en su segunda sesión, el 25 de enero de 2005. Al adoptar la Resolución, la APCE lamentó las miserables condiciones en que vivían los cientos de miles de desplazados y la situación sin resolver del conflicto de Nagorno Karabaj, que duraba ya más de dos décadas. También expresó su honda preocupación por la acción militar, que había dado lugar a hostilidades étnicas generalizadas entre las partes y provocado desplazamientos étnicos a gran escala. Al adoptar la Resolución, la APCE también reafirmó que la independencia y la secesión de un territorio del Estado principal sólo pueden lograrse por medios lícitos y pacíficos y sin la ayuda de la fuerza militar, que conduce al desplazamiento étnico y a la anexión de facto de ese territorio a otro Estado.
La Resolución también llamaba la atención de los Estados miembros sobre el hecho de que «la ocupación de territorio extranjero por un Estado miembro constituye una grave violación de las obligaciones de dicho Estado como miembro del Consejo de Europa y reafirma el derecho de las personas desplazadas de la zona de conflicto a regresar a sus hogares en condiciones de seguridad y dignidad». Una posibilidad subyacente era que, si fracasaba el proceso de negociación bajo los auspicios del Grupo de Minsk de la OSCE, las partes en conflicto se plantearan recurrir a la Corte Internacional de Justicia (CIJ) como firmantes de la Carta de las Naciones Unidas. La Resolución también reafirmaba las Resoluciones del Consejo de Seguridad de la ONU 822 (1993), 853 (1993), 874 (1993) y 884 (1993), instaba a las partes implicadas a cumplirlas y pedía a las partes que se abstuvieran de emprender nuevas acciones militares. Debe hacerse especial hincapié en la declaración de la PACE (APCE) de que «partes considerables del territorio de Azerbaiyán siguen ocupadas por las fuerzas armenias y las fuerzas separatistas siguen controlando la región de Nagorno-Karabaj».612 Esta declaración significaba que la Asamblea Parlamentaria reconocía a Armenia como parte en el conflicto, que implicaba acciones militares en el territorio de Azerbaiyán.